Ciclamen: secretos esenciales para sus cuidados

Una de las flores presentes en muchos jardines es el ciclamen. Es habitual encontrarlas en rojo, rosa, blanco o morado. A continuación aprenderás cómo cuidar estas preciosas flores cuyo momento de mayor esplendor son los meses más fríos.

¿Qué es el ciclamen?

El ciclamen es una planta bulbosa que se caracteriza por sus flores llamativas y su perfume agradable. Pertenece a la familia de las plantas Primuláceas y cuenta con más de 20 especies distintas. La especie más común es el cyclamen persicum, o Violeta de los Alpes, originario de Oriente Medio, Túnez, Grecia y del Mediterráneo.

El ciclamen es una planta de invierno que florece a finales de año. Es importante destacar que pierde sus hojas durante los primeros meses del verano y entra en reposo durante esta época. Por esta razón, es importante reducir los riesgos en verano, siempre evitando que se seque demasiado el sustrato.

El ciclamen puede desarrollar flores de diferentes tamaños. Para cuidar adecuadamente del ciclamen, es importante tener en cuenta las siguientes recomendaciones:

• Luz. Necesita luz, pero no directamente del sol. Es recomendable colocarlo en un lugar con luz indirecta.
  
• Temperatura. El ciclamen prefiere temperaturas frescas, entre 10 y 20 grados Celsius.
  
• Riego. Moderado, evitando que el sustrato se seque demasiado. Es importante no regar sobre las hojas.
  
• Sustrato. El ciclamen prefiere un sustrato rico en materia orgánica y bien drenado.
  
• Abono. Se recomienda abonar la planta cada dos semanas durante la época de crecimiento.
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Cuidados del ciclamen

El ciclamen es una planta que se adapta a diferentes condiciones lumínicas, pero necesita una ubicación adecuada para crecer fuerte y saludable. 

Iluminación 

Prefiere vivir con luz brillante pero indirecta, pues la exposición directa puede quemar las hojas y flores. En exterior, se recomienda plantar en un espacio de semisombra. En interior, en un lugar donde reciba luz indirecta. 

Temperatura 

El ciclamen es una planta de clima fresco que prefiere temperaturas entre 15°C y 20°C durante el día, y alrededor de 10°C durante la noche. Es importante evitar ubicarlo en lugares con corrientes de aire o donde se produzcan cambios bruscos de temperatura. En el exterior, se debe proteger de las lluvias y las heladas. En el interior, se recomienda mantener la temperatura constante y evitar colocarlo cerca de fuentes de calor como radiadores.

Riego 

Necesita riego moderado y constante. Es suficiente con regar dos veces por semana, incluso con una sola vez sobrevivirá fácilmente. De hecho, un riego en exceso puede pudrir las raíces y el bulbo, así como dañar hojas y tallos, que se marchitarán. Por ello, hay que asegurarse de que la maceta tiene una buena aireación. 

Además, es menester evitar el contacto de las hojas y las flores con el agua del riego para que no aparezcan hongos y enfermedades en ellas.

Sustrato

El sustrato debe tener buena capacidad de retención de agua y nutrientes, a la vez que un drenaje efectivo para no producir encharcamientos. Se recomienda emplear una mezcla de tierra y perlita en proporción 2:1 para asegurarlo. 

Adicionalmente, debe estar aireado para que las raíces del ciclamen puedan respirar adecuadamente. Por ello, también se puede añadir turba al sustrato. 

Poda 

La poda regular de flores y hojas muertas es importante para mantener la planta saludable y estimular la floración continua. Se recomienda cortar las flores marchitas lo más cerca posible de la base y eliminar las hojas amarillas o enfermas. Las herramientas utilizadas para ellos deben estar limpias y afiladas para minimizar el daño.

Abono

Lo más adecuado es utilizar abono líquido para plantas con flores cada dos semanas o cada mes. El fertilizante debe ser rico en potasio y fósforo. Es importante no abonar cada menos tiempo para no sobrefertilizar las plantas y estropearlas. 

Se puede utilizar mantillo para mantener la humedad del sustrato, su temperatura, proporcionar nutrientes adicionales a la planta y proteger el sistema radicular de las heladas. 

Periodo de floración

El ciclamen es una planta de floración invernal, concretamente a partir de otoño, y puede durar hasta primavera. Entre sus colores, destacan el rosa, el rojo,el blanco y el morado. Los botones de flor se forman en el centro de las hojas y se abren gradualmente.

Para asegurar que el ciclamen florezca en invierno, la temperatura debe mantenerse fresca y constante, alrededor de 15°C. También es importante contar con un suelo húmedo, pero no empapado. Es recomendable regar desde abajo para evitar que el agua entre en contacto con el bulbo.

Cuidados Específicos

• Hojas. Mantenerlas limpias y sin polvo, utilizando un paño o esponja húmeda, para evitar la aparición de plagas. Además, deben eliminarse las hojas muertas o amarillas para que la planta se centre en crear nuevas. 
• Manejo de hongos. El ciclamen es susceptible a enfermedades fúngicas que se pueden prevenir regando con moderación y evitando que se acumule agua en el plato de la maceta. También pueden emplearse preventivos y tratar los hongos lo antes posible con fungicidas específicos si ya han aparecido. 
• Plantación. El suelo debe ser de calidad y los bulbos deben plantarse a una profundidad de 5 cm y separarlos entre sí 10 cm. 
• Elección de la maceta. El tamaño ideal de una maceta para el ciclamen es de, al menos, 15 cm de diámetro y 20 cm de profundidad. Por supuesto, debe tener agujeros para el drenaje. Pueden plantearse varias a la vez en una jardinera. 

Cuidados del ciclamen en interior

El cuidado del ciclamen en interior es igual que en exterior. Únicamente hay que estar más atento al sustrato en épocas de altas temperaturas, cuando puede secarse demasiado. Al estar en macetero, es fácil cambiarlo de lugar a una sala más fresca de la casa. 

Periodo de Latencia

Durante el verano, las plantas de ciclamen decaen con las altas temperaturas y entran en lo que se llama fase de reposo y letargo. En ella pierde algunos tallos, hojas y flores. Lo mejor es mantenerlas en semisombra, en lugares frescos o quitar la parte bulbosa para que se seque y volver a plantar en otoño o invierno. 

Al encontrarse en reposo, necesita menos nutrientes y menos agua, dejando que la tierra se seque entre riegos. 

Resumen del cuidado del ciclamen