3 maneras de cocinar calabaza
A pesar de que muchos piensan que las calabazas no son más que elementos decorativos en la festividad de Halloween, lo cierto es que esta hortaliza presenta un sinfín de propiedades nutricionales, así como posibilidades gastronómicas en múltiples recetas culinarias. Pariente botánica de otras deliciosas frutas como el calabacín o el melón, la calabaza es originaria de América Central. Aunque existe una amplia variedad, con distintos tamaños y colores, la mayoría de las calabazas pesan entre 2 y 8 kilos. Pese a estas características heterogéneas, todas ellas comparten una estructura en común: una pulpa dulce, una piel dura y una cavidad llena de semillas ricas en zinc y magnesio. Además, es muy importante saber cómo cocinar calabaza para poder exprimir al máximo sus vitaminas y minerales.
La calabaza es una fruta muy versátil, ya que puede utilizarse en muchas recetas culinarias, ya sea como producto principal o como guarnición. Además, con este superalimento podemos preparar tanto platos dulces como unos riquísimos buñuelos de calabaza, así como salados, como por ejemplo un puré con queso parmesano gratinado por encima. Pero sus infinitos usos culinarios no son los únicos beneficios que presenta, ya que la calabaza aporta una gran cantidad de vitaminas del grupo A, minerales y propiedades antioxidantes. Todos ellos ayudan a mantener nuestro organismo en las mejores condiciones por lo que es una excelente opción para todos aquellos que quieren llevar una vida saludable.
Propiedades y beneficios de la calabaza
- Refuerza el sistema inmunitario: este alimento también aporta un alto contenido en vitamina C, que se ha demostrado que ayuda a aumentar la producción de glóbulos blancos, haciendo que las células inmunitarias funcionen de manera más eficaz.
- Mejora la visión: la calabaza contiene antioxidantes que nos protegen contra las enfermedades oculares y las infecciones como la conjuntivitis. Según varios estudios científicos, las personas con una ingesta más elevada de betacaroteno, sustancia presente en este alimento, tienen un riesgo significativamente menor de sufrir cataratas.
- Beneficios para la piel: incluyen antioxidantes como alfa-caroteno y beta-criptoxantina que ayudan a neutralizar los radicales libres, un tipo de molécula inestable que puede dañar a otras células como las queratinocitos, las células predominantes de la epidermis.
- Reduce la inflamación: el aceite de semillas de calabaza alivia el dolor articular provocado por la artritis. Además debido a su gran aporte de minerales, la calabaza es un alimento perfecto para aumentar la densidad mineral ósea.
Cómo cocinar calabaza: 3 recetas ricas
Flan de calabaza asada
El flan es un postre delicioso y fácil de preparar. Hay que tener en cuenta que aunque la calabaza es una fruta que apenas aporta calorías, el flan no es un plato ligero, ya que contiene leche y considerables cantidades de azúcar, por lo que es recomendable no abusar de él. Una de las mejores recetas para aprender a cómo cocinar calabaza.
Ingredientes (4 personas):
- 250 g de azúcar.
- 500 g calabaza.
- 250 ml de leche entera.
- Media cucharada de zumo de limón.
- 4 huevos.
- 1 cucharada de maicena.
- 4 cucharadas de agua (30-40 ml).
Instrucciones paso a paso:
- Primero debemos hervir la calabaza. Necesitamos una cazuela con abundante agua a fuego medio-alto. A continuación, añadimos la calabaza pelada y troceada junto con una pizca de sal y la dejamos cocer durante 15 minutos.
- Después de este tiempo, la calabaza habrá adquirido una textura suave y mullida. La retiramos del fuego y la escurrimos bien para eliminar el exceso de agua. Seguidamente, colocamos el resultado en un vaso batidor y trituramos hasta adquirir un aspecto de puré.
- Mientras la calabaza se atempera, preparamos el caramelo. Para ello necesitaremos una cazuela a fuego suave, donde añadiremos 175 g de azúcar, zumo de limón y 4 cucharadas de agua en este orden. Es importante no dejar de remover la mezcla con una espátula, para que el azúcar se vaya caramelizando e integrando homogéneamente. Después de unos pocos minutos, tendremos el caramelo listo, adquiriendo una textura elástica y fina. Deberemos colocarlo en una flanera o en un molde especial de flanes.
- A continuación, añadimos en un bol la maicena y medio vaso de leche. Mezclamos bien hasta que ambos ingredientes se integren perfectamente y no se detecte la presencia de grumos. A continuación, añade la leche sobrante y remueve de nuevo.
- En otro recipiente incorporamos los huevos junto con el azúcar y lo batimos bien, luego añadimos la mezcla de maicena y leche que habíamos preparado previamente y por último, agrega también el puré de calabaza. Cuando tengamos todo en una misma mezcla, removemos bien hasta conseguir una crema con textura sedosa y uniforme.
- Pasamos la mezcla al molde donde previamente habíamos colocado el caramelo y lo introducimos en el horno a una temperatura de 150 ºC durante una hora. Cuando este periodo de tiempo haya transcurrido, sácalo del horno y deja reposar durante dos minutos antes de desmoldar y servir. cocinar calabaza de esta manera es la forma más sencilla para que los más pequeños se empiecen a familiarizar con esta verdura.
Canelones de calabaza
Se trata de una receta de calabaza sencilla que nace como una alternativa vegetariana (que no vegana) a los tradicionales y famosos canelones de carne picada. En nuestro país, este plato ha gozado de gran popularidad, sobre todo en zonas mediterráneas del norte peninsular como en Cataluña, debido al intercambio cultural y comercial entre esta región e Italia.
Ingredientes:
- 1 diente de ajo.
- 1 cebolla.
- 1 calabacín.
- 400 gramos de calabaza.
- 4 tomates.
- 15 láminas de canelones.
- 250 g de queso ricota.
- 100 g de queso parmesano.
- 50 g de pasas.
- 100 ml de vino blanco.
- Dos ramas de romero.
- 30 ml de aceite de oliva (preferiblemente virgen extra).
- Sal y pimienta.
Instrucciones paso a paso:
- Deberemos poner una cazuela con agua a hervir (1 L aproximadamente), agregando una pizca de sal y dos ramas de romero. A continuación introducimos las láminas de canelón con mucho cuidado para que cuezan durante el tiempo recomendado por el fabricante, aunque siempre es preferible que la pasta quede un poco al dente. Cuando estén listas, escúrrelas y extíendelas sobre un paño seco para que absorban el agua restante.
- Dejando la pasta a un lado para su posterior preparado, pon las pasas a remojo en un bol con agua y desmenuza el queso ricota. A continuación, cortamos la cebolla en brunoise y la pochamos en una sartén grande con aceite de oliva hasta que comience a dorarse. Pelamos la calabaza y la cortamos en pequeños dados de no más de dos centímetros y la añadimos a la sartén. Posteriormente incorporamos el calabacín también cortado en pequeños cuadrados y salpimentamos.
- Cuando el calabacín, la cebolla y la calabaza adquieran una textura suave, añade el queso ricota previamente desmenuzado y las pasas escurridas y mezcla bien. Rellena cada canelón con la mezcla que hemos obtenido, colocándolos uno al lado del otro en una fuente de horno con suficiente profundidad.
- A parte, pelamos los tomates y los ponemos en el vaso de la licuadora, añadiendo el diente de ajo y el vino blanco. Después de triturarlo, traspasa la salsa de tomate resultante a una sartén y agrega de nuevo un par de cucharadas (30 ml) de aceite de oliva. Cocínalo a fuego suave durante 10 minutos.
- A continuación, debemos cubrir los canelones con la salsa de tomate, añadiendo por encima queso parmesano. Horneamos hasta asegurarnos de que la superficie esté gratinada, más o menos unos 8-10 minutos. Después de este paso el plato estará listo para servir.
Crema de calabaza
Sin duda es uno de los platos estrella que se preparan con esta fruta, bien sea por su increíble sabor, por su gran aporte de vitaminas o por su fácil y rápida preparación en tan solo 30 minutos. Es una receta muy práctica para saber cómo cocinar calabaza ya que además, una de sus ventajas es que se puede preparar en grandes cantidades o incluso congelar, lo que la hace el plato perfecto para el día a día.
Ingredientes (4 personas):
- 1 calabaza.
- 2 puerros.
- 2 cebollas.
- Sal.
- 45 ml de aceite de oliva.
- Semillas de lino o chía.
Instrucciones paso a paso:
- Primero que todo, debemos poner una olla con abundante agua y una pizca de sal a hervir. Mientras, cortamos la cebolla y el puerro en juliana y la calabaza en pequeños daditos de no más de 2 centímetros. Cuando el agua esté hirviendo, añadimos las verduras y la calabaza y dejamos que se cocinen durante 20 minutos a fuego medio.
- Transcurrido este periodo de tiempo, colocamos las hortalizas en una batidora eléctrica con ayuda de una espumadera. Podemos guardar el caldo resultante de la cocción para corregir la textura de la crema.
- Añadimos una pizca de sal y tapamos la batidora para triturar bien, hasta que quede una crema homogénea y sin grumos. Una vez hayamos obtenido la consistencia deseada, es recomendable añadir unas semillas de lino o chía para darte un toque “crunchy” a la receta.
Existen un sinfín de recetas ricas y saludables para saber cómo cocinar calabaza. Esta fruta aporta grandes beneficios a nuestra salud por su alto contenido en vitaminas B, C y E, así como en minerales esenciales como el magnesio, por lo que es un alimento que no puede faltar en nuestra dieta.