Verduras y hortalizas de verano
La llegada del calor provoca que muchas personas se decanten por una alimentación más sana y ligera, provista de una mayor variedad de verduras de verano, cuyo elevado porcentaje de nutrientes las convierten en elementos imprescindibles en todas las dietas veraniegas.
La posibilidad de ser cocinadas de manera fácil y rápida o incluso tomarlas frías, hace que su consumo sea más apetecible con el buen tiempo. Con ellas se puede elaborar una inmensa variedad de platos, entre los que destacan los salmorejos, gazpachos y multitud de ensaladas. Es difícil asegurar la calidad de la comida si no contamos con los ingredientes idóneos. Por ello, para exprimir al máximo los nutrientes de cada vegetal, es importante tener en cuenta cuál es apto para ser plantado en cada una de las estaciones.
Diferentes verduras y hortalizas de verano
Disfrutar de los mejores alimentos de temporada no es una tarea difícil, ya que basta con tener un pequeño espacio acondicionado para el cultivo y contar con las semillas correctas para cada momento.
Berenjenas
Una de las hortalizas estrella para esta época es la berenjena (Solanum melongena). Aunque se puede encontrar durante el resto del año, es en verano cuando se le puede sacar un mayor partido, puesto que las altas temperaturas son perfectas para su mejor desarrollo, llegando a superar los 65 centímetros. Cuenta con un elevado contenido de fibra y antioxidantes, que se ven acentuados cuando se cultivan en meses de calor. Además, contiene vitamina B6, esencial para la regulación de los procesos químicos del cuerpo, ayudando a reducir los niveles de colesterol. Las puedes degustar en cualquier forma, ya que actualmente existen cantidad de recetas con berenjenas que se adaptan al gusto de todos.
Judías
Las judías (Phaseolus vulgaris) son unas excelentes verduras que deben ser consumidas preferiblemente en estaciones calurosas, porque es en este momento cuando proporcionan un mayor beneficio al organismo. Sus propiedades se ven incrementadas y, gracias a su alto contenido de vitamina B y C, previene las infecciones urinarias e incluso la hipertensión. También su sabor y textura mejoran si son cultivadas en el momento adecuado. Idóneas para formar parte de cualquier dieta debido a sus bajas calorías y grasas, mantener la línea con ellas es una tarea muy fácil. Asimismo, al ser hortalizas por fuera y legumbres por dentro, ofrecen la posibilidad de cocinar alimentos de gran variedad.
Tomates
La hortaliza por excelencia es el tomate, (Lycopersicon escultelum) probablemente sea una de las más consumidas, la cual no puede faltar en ninguna cocina. Puede ser preparada de infinitas maneras y combinada con multitud de alimentos. Pero además, su valor nutricional es inmenso y para aprovechar este aspecto es importante que sea plantada en verano, cuando alcanza su máximo esplendor. Aporta vitamina A y C, al mismo tiempo que ofrece protección ante enfermedades oculares, mejora el aspecto de la piel y ayuda a una buena circulación sanguínea.
Pepinos
En temporadas veraniegas, el pepino (Cucumis sativus) es otro de los vegetales que no ha de faltar en ningún huerto, porque es cuando se consigue extraer todos los beneficios que puede aportar. Además, es en estos climas soleados y cálidos donde se hace más agradable su consumo, debido a su frescura y ligereza. Destaca por ser un antiinflamatorio natural, además de convertirse en un aliado perfecto para una mejor digestión por su alto contenido de fibra.
Pimientos
El pimiento (capsicum annum) se ha convertido en una hortaliza imprescindible para cualquier dieta mediterránea. En todas las temporadas, aunque es en verano cuando ofrece sus mejores características. Su versatilidad es uno de los motivos por los que tanto se consume, pero no es menos asombroso todo lo que aporta. Las vitaminas A, B y C son algunos de los compuestos orgánicos más importantes que proporciona, pero también se considera como una gran fuente de carbohidratos.
Estas son solo algunas de las verduras de verano más consumidas recomendadas para las cosechas veraniegas, pero existe un amplio abanico de opciones donde poder elegir. No obstante, antes de comenzar a plantarlos es muy importante que el huerto tenga las condiciones adecuadas.
Una vez seleccionados los vegetales que se van a cultivar, otro paso crucial que se ha de llevar a cabo es elegir la ubicación perfecta para cada hortaliza, dentro del propio terreno. Un lugar que ha de estar bien abonado y con mucha luz solar. Así, se logrará un huerto con los productos más envidiables. Disfrutar de un huerto propio parece una tarea compleja, pero nada más lejos de la realidad, solo se necesita dedicación y una pizca de pasión.