
Cómo proteger el huerto del frío
Cuando llegan los meses de otoño e invierno y empiezan a bajar las temperaturas, los agricultores comienzan a temer el frío extremo y por ello buscan cómo proteger el huerto de las heladas. Que se congele la cosecha les supondrá grandes pérdidas, tirando por tierra el trabajo de muchos meses.
No es extraño que nos vengan a la mente imágenes de pequeñas hogueras o antorchas en medio de grandes plantaciones, como último intento por proteger el huerto de las heladas y salvaguardar los frutos del frío.
Antes de que lleguen las temperaturas extremas que provocan este fenómeno, es necesario preparar nuestros cultivos. Con abono rico en potasio podemos conseguir una mejor salud y resistencia de las plantas.
Consejos para proteger el huerto de las heladas
Instalar mini invernaderos
Actualmente, existen invernaderos de todos los tamaños, como los que ocupan grandes extensiones de terreno y son específicos de la industria agrícola. Los más pequeños están pensados para las macetas de jardín o terraza, y los medianos para huertos urbanos y pequeñas plantaciones.
Si los cultivos no son muy extensos, puede hacerse con uno de tamaño mediano, son fáciles de instalar y le sacarán de un apuro en caso de heladas.
Con la instalación del invernadero se consigue aumentar tanto la temperatura del suelo como la del aire.
En el caso de cultivos recién plantados, es posible utilizar botellas grandes de plástico partidas por la mitad como mini invernaderos.

Mantas térmicas
Son una opción económica, cómoda y sencilla, ya que se colocan de forma rápida. Con ellas cubrimos las plantas por la tarde para protegerlas de las heladas nocturnas.
Las puedes poner por encima del cultivo directamente o les puedes añadir una pequeña estructura para formar un pequeño invernadero. También se puede utilizar en árboles frutales.
Utilizar riego por micro-aspersores
La utilización del riego por micro-aspersores es beneficiosa ante las heladas. Cuando las temperaturas son muy bajas y se produce un congelamiento del agua, se cede una cantidad de calor a las flores. Con esto se crea una fina capa de hielo que los aísla del frío exterior, lo que se llama el “efecto iglú”.
Para conseguir este efecto los aspersores deben funcionar constantemente hasta que el hielo se haya derretido por completo. Así, conseguimos que la temperatura de las plantas no descienda de los 0ºC.
Aunque tiene muchos pros, este método tiene dos contras muy importantes: por un lado, requiere una gran cantidad de agua, y por otro, una inversión para la instalación del sistema de riego.

Plástico de burbujas
Sí, no nos hemos vuelto locos. Protege tus plantas con plástico de burbujas, de esta manera las estarás aislando de las bajas temperaturas y se mantendrán con su propio calor.
Una técnica pensada especialmente para el cultivo de árboles frutales o plantas en maceta como olivos, aguacates, limoneros o rosales.
Antorchas de parafina
Las pacas de paja se utilizaban tradicionalmente para calentar los cultivos cuando llegaba una helada. Sin embargo, a pesar de que es una de las soluciones más económicas no son muy recomendables ya que las nubes de humo que provocan pueden ser contaminantes. Además, requieren mucha mano de obra.
Una opción más eficiente serían las antorchas de parafina. No genera humo, es reutilizable y dura hasta doce horas, aunque su coste es más elevado que las pacas de paja. Por ese motivo,se aconseja utilizarlo solo en momentos ocasionales, colocados como focos de calor en nuestros cultivos.

Productos elaborados a base de alfa-tocoferoles
Los alfa-tocoferoles son sustancias químicas que actúan como anticongelante y pueden reducir o evitar los daños por heladas leves. Se deben aplicar unas 24 o 48 horas antes.
¿Y para proteger las raíces?
Todas las partes que conforman una planta pueden sufrir en los meses de invierno, entre ellas las raíces. Para protegerlas podemos llevar a cabo distintas técnicas, por ejemplo, el acolchado o mulch.
Esta técnica consiste en colocar materiales orgánicos o inorgánicos sobre la tierra que cubre las plantas. Podemos utilizar elementos como las hojas secas, paja, serrín, corteza de pino, o textiles de algodón o lana.
El mulch o acolchado ayudará a preservar y retener la temperatura de las raíces protegiéndolas cuando se produzcan heladas. Y no solo eso, sino que también las protege en verano de los rayos del sol.
Debido al cambio climático y al aumento de las temperaturas extremas, proteger los cultivos ante las heladas se ha convertido en los últimos años en algo cada vez menos extraño y más habitual.